05 marzo 2014


CAMBIO DE HÁBITOS HACIA UNA SOCIEDAD COHERENTE ... O SOSTENIBLE



Con el tiempo, la sociedad se ha dado cuenta que para ayudar a generar un cambio de conciencia, de maneras de trabajar y de proceder, se debía poner un poco de luz en temas referentes a la sostenibilidad, importantes para nuestra vida diaria. El conocimiento sobre la amenaza de nuestra conducta sobre el medioambiente parece aumentar a gran velocidad, sin embargo, a medida que vamos siendo conscientes del efecto de nuestra actividad sobre el planeta, no ocurre lo mismo con las propuestas o soluciones que necesitamos encontrar para enfrentarnos a esta amenaza. Los avances tecnológicos en materia medioambiental y la conciencia global están creciendo día a día, intentando anticipar de alguna forma los efectos negativos (no siendo suficiente para salvaguardar nuestro medio natural en buen estado de salud, con actitudes cómodas  e inactivas).
No podemos esperar a tener una justificación científica o una normativa que nos obligue a la toma de decisiones, sino que debemos actuar con conciencia y anticipación. La decisión personal de contribuir a no empobrecer más la calidad de nuestro entorno tiene que ver más con nuestra conciencia. Desde un punto de vista más global y menos doméstico, ya hace varios años que se intenta poner dimensión al problema de la contaminación y el deterioro de nuestro entorno natural, cuyas consecuencias sufrimos a diario. Por ejemplo,  a través del cambio climático, que ya no es una loca teoría sino una realidad.
Las sociedades primitivas eran sostenibles por necesidad. A pesar de que vivían de explotar la naturaleza y extraer de ella todo lo que podían según su nivel de desarrollo, la falta de recursos técnicos y la baja densidad de población mundial favorecía una recuperación natural a mayor velocidad que la explotación humana. Si no se producía así, esta sociedad moría por falta de recursos o tenía que migrar, siempre que existiera un ámbito territorial suficiente que no estuviera en concurrencia de explotación con otros pueblos. Dos aspectos fundamentales han cambiado desde entonces:
1-La población mundial ha crecido de forma exponencial (ha pasado de los casi 1000 millones en el año 1800 a más de 6000 millones en el año 2000).
2-El despegue técnico que trajo consigo la revolución industrial propicia una explotación masiva a una velocidad devastadora. Posteriormente, la Globalización dejó de lado el entorno natural.
El resultado es que no podemos continuar destruyendo la naturaleza a la velocidad de nuestras capacidades, puesto que hemos superado el ritmo de recuperación natural y tampoco podemos asentarnos en poblados (en otro tiempo, muy eficientes), dado que con el volumen de población actual serían verdaderos devoradores de suelo.


Por lo tanto, en contra de lo que opina mucha gente, la arquitectura tradicional o vernácula, que fue eficiente en su momento, no lo sería si la reprodujéramos hoy en día, puesto que estaba configurada para satisfacer una serie de condiciones y necesidades que hoy han cambiado. La nueva ciudad sostenible tiene que responder a los condicionales actuales a través de los medios técnicos y necesidades sociales de hoy en día. ¿Y cómo es la ciudad sostenible que cubre las necesidades de la sociedad actual? Tienen que ser ciudades que respondan a los principales problemas de la sociedad actual: superpoblación, falta de recursos naturales, altos niveles de contaminación, problemas de desigualdad social, política, económica, cultural,...
1. Conseguir que la población tenga acceso, a los equipamientos públicos básicos (transporte      público, centros educativos, recogida selectiva...).
2. Implementar acciones de renovación urbana con el objetivo de favorecer el futuro de la               ciudad consolidada (densidad media-alta).
3. Promover el desarrollo de Huertos Urbanos
4. Reducir las emisiones de CO2 y otros gases nocivos:
    a. Apostando por la eficiencia energética
    b. Impulsando las energías renovables
    c. Desarrollando actuaciones para fomentar los desplazamientos en transporte público, a             pie y en bicicleta
    d. Rehabilitando energéticamente el parque de viviendas promoviendo dentro de las nuevas         construcciones la autosuficiencia energética y el reciclaje del agua.
5. Favorecer la economía, la producción y el consumo de proximidad y comercio-distribución-        tejido comercial local.
6. Reducir, reutilizar y reciclar. Empleo de los materiales de construcción del entorno próximo.

“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica:
 LA VOLUNTAD”.

                                                                                                                               << Albert Einsten>